Alberto Moro, fundador del Museo del Deporte “Pierre de Coubertin” de La Falda, fue homenajeado por su trayectoria en el mundo deporte y en la ciudad en una emotiva y sencilla ceremonia a tres días de su fallecimiento.
Frente a sus cenizas, ubicadas en el centro del teatrino de la Biblioteca Popular Sarmiento (de la que Moro formó parte), su hija Valeria; amigos/as y autoridades municipales recordaron con anécdotas su vida como deportista, entrenador y dirigente en el mundo del deporte, en especial el olímpico, aunque también como profesor, kinesiólogo, coleccionista y escritor.
“Me siento orgullosa, no pensé que iba a tener tanta repercusión, aunque era muy conocido en el ambiente deportivo internacional. Me emociona. Pienso que el estaría muy contento porque le gustaba que lo reconocieran, así que era una buena oportunidad para despedirlo”, señaló Valeria a La Estafeta.
Moro nació en 1932 en Suiza y se terminó instalando en La Falda en 1977 junto a su familia. En la ciudad fundó el Museo del Deporte en 1989, espacio que se encuentra en pleno proceso de digitalización (museocoubertin.com.ar) y que, durante muchos años, fue el primer y único museo de deporte olímpico de la Argentina.
Fue integrante de la Junta de Historia de La Falda y en 2015 fue reconocido como “Ciudadano destacado”. Dos años después fue declarado también como “Ciudadano destacado de la cultura y el deporte” de La Falda.
“Fue una persona muy valiosa para nuestra comunidad y, al no haber velatorio, para nosotros era importante tener la posibilidad de despedirlo como se merecía y como a él le hubiera gustado. Tuvo una vida muy activa, presente y constructiva para todos”, remarcó la directora de Cultura local, Ana Elizóndo.
Y, sobre el futuro del Museo, agregó: “Estamos dispuestos a trabajar en conjunto entre la familia, instituciones y la Municipalidad para ver de qué manera podemos lograr que esta colección siga funcionando en la localidad”.
El acto incluyó también la lectura de dos cartas, del intendente Javier Dieminger, y la vice, Luciana Pacha, destacando el paso de Moro por La Falda.
Moro acumuló un extenso currículum en el mundo del deporte, en especial el olímpico, con una importante trayectoria en el mundo del deporte: como deportista (practicó fútbol, boxeo, gimnasia artística, natación, cama elástica y tenis), entrenador, profesor y dirigente.
En los distintos roles, estuvo presente en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, Seúl y Atenas; seis Juegos Panamericanos y dos Juegos Odesur.
Fue consejero del Comité Olímpico Argentino; presidente y secretario general de la Federación Argentina de Gimnasia; fundador y vicepresidente de la Federación Argentina de Deportes Acrobáticos y, en el plano profesional, kinesiólogo de las delegaciones argentinas olímpicas panamericanas y sudamericanas.
Su carrera como docente y entrenador se extendió durante 53 años. De hecho, como entrenador obtuvo el primer Campeonato Nacional de Cama Elástica en 1984 con alumnos de La Falda y Valle Hermoso.