Un raro avistaje tuvo lugar esta semana en el río Yuspe, en Cosquín. Se trata de una parina grande (Phoenicoparrus andinus), ave perteneciente a la familia de los flamencos, que apareció el jueves debajo del puente del río Yuspe de la Autovía de Punilla, en la Reserva Municipal Natural Cultural Río Yuspe de Cosquín.
El ejemplar fue retratado por el guardaparque de la reserva, Tomás Prebendé, y la rareza del avistaje se basa en que se trata de aves migratorias, que se mueven en bandada, y que habitan lagunas y bañados.
“Justo estaba debajo de la autovía sacando la gente que ingresa a la reserva por el puente. Cuando lo vi pensé que era un bicho de plástico que alguien había plantado para sacar una foto, pero cuando me acerqué me di cuenta que era real. Es totalmente nuevo verlos en el Yuspe, porque son aves playeras y en el río no tiene que comer”, contó a La Estafeta Prebendé.
Y agregó: “Me pude acercar a unos cinco metros. Su comportamiento era casi nulo, se movía muy poco. Luego unas personas me comentaron que lo había traído el agua rio abajo, como si no estuviera con todas sus capacidades plenas. Aparentemente se separó de la bandada y ha quedado ahí”.
El animal fue dejado en el lugar, aunque el porqué de su presencia y su próxima parada es una incógnita.
“Lo dejamos tranquilo porque en estos casos, por más que esté enfermo, lo conveniente y lo que marca el protocolo de manejo de fauna es que si no presenta una herida visible no tocarlo”, completó Prebendé.