Bajo la consigna «Queremos un hospital, no un dispensario», vecinos/as de distintas localidades de la región llevaron a cabo este miércoles un nuevo abrazo simbólico al Hospital Municipal de La Falda, reclamando al intendente Javier Dieminger la reapertura de quirófano, que lleva dos meses cerrado en el marco de la crisis presupuestaria.
Puntualmente, pidieron la normalización del servicio de obstetricia y cirugía para reactivar los partos en el hospital y que se acelere el tratamiento del proyecto para la “integración sanitaria de la zona centro norte de Punilla», que eleve la categoría del centro de salud a intermunicipal. En este sentido, insistieron con la realización de una Audiencia Pública.
Además, advirtieron sobre renuncias de profesionales; reducción de horas de guardia y rechazaron la idea del Ejecutivo local de tercerizar servicios.
“Esto es un llamado al Intendente Javier Dieminger para que no pase a la historia como el que dio el puntapié de cierre a lo más importante del hospital. Pedimos que se una a la gestión de los otros intendentes y acepte hacer una audiencia publica para que defendamos en conjunto al hospital porque los más golpeados son los ciudadanos de la región, en especial los que no cuentan con obras sociales. Hoy más que nunca hace falta inversión en salud”, señaló el reconocido pediatra local, Benjamín Malamud.
Y agregó: “La Provincia eligió a Carlos Paz para un nuevo hospital. Bienvenido, pero no descuiden el norte del departamento. No se puede seguir explotando al personal de la salud”.
De la protesta participaron medio centenar de integrantes de las organizaciones civiles “Vecinos autoconvocados en defensa del Hospital de La Falda”; el Centro de Protección Familiar (CeProFa); Jubilados en Movimiento Punilla; Ni Una Menos La Falda y médicos de urgencia del Hospital de La Falda.
“Hace poco más de un año que estoy en el Hospital de La Falda y estoy sumamente preocupada por la salud pública en general. Esto no solo está pasando en La Falda, sino en todos los municipios de la provincia. Quieren hacer desaparecer la salud pública y privatizarla. No vamos a poder sostenerla si como ciudadanos no luchamos para que se mantenga”, remarcó la médica especialista en obstetricia y ginecología Carla Soto.
Sobre la situación de los profesionales, completó: “Los que hoy se reciben se van a donde puedan cobrar como corresponde, y acá nos siguen bajando el sueldo y las horas. Lamento mucho las bajas de clínica; de pediatría, teníamos grupos armados con compañerismo y trabajadores y colegas excepcionales. Pero, lamentablemente, acá y en todos los municipios no importan los años. Sos un número”.