Concejales del oficialismo y la oposición se cruzaron fuerte en la sesión de este miércoles, luego de que la bancada de Juntos por La Falda aprobara la eliminación del cargo de secretario de bloque, introducido por decreto en el reglamento del Concejo Deliberante en 2018.
Según se indicó, la decisión obedece a la necesidad de «achicar gastos» en el Estado municipal. El texto de la ordenanza sancionada señala puntualmente que “la dinámica de trabajo y la distribución de la estructura del Estado exige una adecuación del funcionamiento del Concejo Deliberante de La Falda, en términos de gestiones administrativas”.
La iniciativa partió desde la presidencia del Concejo, a cargo de la viceintendenta Luciana Pacha, y fue acompañada por los seis concejales del oficialismo, aunque rechazada por la oposición, que pidió un “recorte parejo en todas las áreas” y denunció una “persecución política”.
“Tener un secretario para cada bloque nos pareció algo redundante. Incluso se reconoció que el secretario de bloque de Juntos por La Falda, Víctor Pérez, muchas veces hizo más de secretario de la Secretaría del Concejo, que del bloque. Además, en el entorno económico en el que estamos creemos conveniente la posibilidad de achicar la estructura del Estado, al menos desde el Poder Legislativo. La idea es acortar lo más que se pueda los costos, ya que por ahora tampoco se han contratado asesores letrados o técnicos”, señaló en el inicio de su exposición el concejal oficialista Daniel Pino.
Por su parte, el concejal de La Falda en Acción Francisco Villanueva retrucó: “Se habla de la dinámica de trabajo y disminución de la estructura del Estado, pero serían dos secretarios que cobraban alrededor de 200 mil pesos cada uno. Cuando nos hablan de achicar el Estado, y solo se hace en el Concejo, no estamos disminuyendo esa estructura de forma pareja. Sólo revisando decretos nos encontramos con 183 becados en la Municipalidad; la reciente contratación de una persona en el área de Fiestas y Festivales; la lista de contratados; los prestadores de servicios con varias sorpresas por lo que cobran o lo que cuesta el CIT, que lo vale. Pero cuando se habla de achicar el Estado, no es tan así”.
Además, Villanueva denunció una «persecución política» por parte del oficialismo contra los dos ahora exsecretarios de bloques: “Fijarse sólo en lo que el Estado gasta en dos empleados me parece injusto y una persecución política. Nuestra secretaria, Paola Maldonado, también fue despedida de la RAAC (Red Asistencial de las Adicciones de Córdoba) como psicóloga, cuando el contrato de este espacio fue en la gestión anterior, en la que se acordaron los puestos para personas en el marco de un acuerdo político, con una gestión a nivel provincial. Las dos personas que puso el partido que yo represento hoy fueron cesanteadas”.
Y agregó: “Lo más llamativo que también se lo hicieron al secretario del bloque oficialista, Víctor Pérez, que le pasaron factura por jugar en la interna radical (fue precandidato a concejal en la lista de Eduardo Arduh)”.
Ante el planteo, Pino, respondió: “Esta bueno este análisis del concejal para que se tenga en cuenta a la hora de restructurar el Estado. Nosotros desde el Legislativo queremos dar una muestra; un ejemplo o puntapié inicial en ese sentido. Lo de la persecución política es un concepto del concejal y respecto al secretario de bloque que teníamos, lejos de dejarlo en banda -por decirlo de alguna forma-, se lo puso como encargado en la Terminal de Ómnibus”.
Ante la respuesta, y cerrando el debate, Villanueva completó: “Lamento que se genere el diálogo, pero me pregunto: ¿Dónde está la reducción del Estado si la persona que trabajaba en el Concejo es ubicada en otra área? La verdad que no se ve”.
