El escrutinio definitivo de las elecciones del domingo en Córdoba arranca este miércoles y podría durar diez días. A la espera de su resultado, el candidato a gobernador de Juntos Por el Cambio, Luis Juez, no reconoció aún la victoria de Martín Llaryora y denunció graves irregularidades en el conteo provisorio en toda la provincia.
En medio de la polémica, el Tribunal Electoral Provincial dispuso que el escrutinio definitivo comience en el Salón de los Pasos Perdidos del edificio de Tribunales II. El conteo se realizará sobre las actas de apertura, cierre y escrutinio originales que fueron confeccionadas manualmente y que acompañan cada urna, y no sobre las cifras digitalizadas que arrojaron errores.
La actividad de escrutinio se concretará de lunes a sábado, entre las 9:00 y las 18:00. Para llevar a cabo esta tarea, el tribunal -integrado por los magistrados Marta Vidal, Jorge Namur y Leonardo González Zamar- dispuso que se conformen diez mesas de validación y una mesa de incidencia.
En cada mesa de validación, se cotejará el acta de apertura, cierre y escrutinio original (firmada por las autoridades de mesa de votación y los fiscales presentes el día de la elección) con el acta que tengan los representantes de las distintas agrupaciones políticas para su aprobación. Este procedimiento se llevará a cabo en presencia del personal del Tribunal Electoral Provincial y los apoderados o fiscales partidarios presentes (uno por partido en cada mesa escrutadora).
En caso de no acordar tal validación, se remitirá el acta a la mesa de incidencias. En cambio, si no se contara con el acta original, se procederá a la apertura de la urna. En la mesa de incidencias, se procederá a analizar el acta de apertura, cierre y escrutinio original remitida por las mesas escrutadoras con aquellas actas que lleven los representantes de las distintas agrupaciones políticas para su aprobación. Cuando no se llegue a la aprobación del acta incidentada, se podrá realizar el escrutinio de la urna pertinente.
En el escrutinio provisorio, fue concluido cuando faltaban computar 460 mesas. Llaryora (Hacemos Unidos por Córdoba) obtuvo 42,76% de los votos, mientras que Juez quedó con 39,76%. La diferencia es de 3 puntos porcentuales (57.651 sufragios). En números, Llaryora sumó 822.057 votos mientras que Juez tiene 764.406.
Sin embargo, JxC denunció graves irregularidades en toda la provincia, con “inconsistencias que se repiten” en la carga de datos del escrutinio provisorio por fallas en los escaneos del sistema Turing y reclamó que el conteo definitivo se realice con las actas manuscritas y poniendo el contador en cero.
“No venimos a denunciar un fraude electoral, pretendemos que el acto eleccionario de Córdoba sea transparente, ese es el único objetivo de Juntos por el Cambio”, señaló el radical Marcos Ferrer en conferencia de prensa, en la que se presentaron además los resultados de cotejos propios en el departamento de Tercero Arriba “mesa por mesa”, que muestran “un 25 por ciento con errores”.
Por su parte, el jefe de campaña de Hacemos Unidos por Córdoba, Manuel Calvo, ratificó el triunfo de Llaryora por más de 3 puntos porcentuales dando a conocer datos confeccionados en base al 99.5 por ciento de las actas, para lo cual se sumó el escrutinio provisorio al que llegó la Justicia Electoral, que alcanza al 94.9 por ciento del total, más 417 actas provistas por las autoridades de mesa a los fiscales de la coalición.
“En base a esa confección de datos, el resultado da que nuestra fuerza política obtuvo 859.786 votos, contra los 797.418 votos de Juntos por el Cambio”, dijo el jefe de campaña, es decir una diferencia de 62 mil votos.
Y agregó: “Como todos los cordobeses, nos vemos perjudicados por lo que pasó en la carga de datos realizada por la Justicia Electoral, y queremos pedirle a este órgano que acelere el escrutinio definitivo para que todos los cordobeses puedan corroborar estos datos”.
