La Municipalidad de Valle Hermoso abrió las puertas de su flamante Hospital Municipal “René Favaloro”. En un emotivo acto, el intendente Jorge Caserio dejó inaugurada la primera etapa del centro de salud, que comenzó a funcionar oficialmente con la primera guardia médica en la madrugada de este sábado.
El corte de cintas significó la finalización del cien por ciento de las obras edilicias en la estructura ubicada en Posadas y República Argentina, que tiene poco más de 800 metros cuadrados cubiertos. Además, quedaron habilitadas la sala de espera y recepción; el sector de kinesiología; farmacia; cinco consultorios y la guardia (shock room) que se prestará durante las 24 horas. En tanto, las especialidades médicas se brindarán con sistema de turnos previos de lunes a viernes, entre las 8:00 y las 21:00.
Esta primera etapa demandó la mudanza de toda la estructura administrativa y médica del exdispensario Eva Perón -espacio que será reinaugurado en las próximas semanas con el mismo nombre, aunque como centro cultural- y la incorporación de nueva aparatología como un monitor multiparamétrico; desfibrilador; cardiógrafo; equipamiento para controlar la tensión arterial, saturómetro y un aspirador. Para la segunda y tercera etapa, previstas para este año, se sumarán un sector de diagnóstico por imágenes y camas de “internación fría”.
“La obra, que originalmente era para construir el CIC, estaba frenada y sin fondos. El 90 por ciento de la población ya no creyó más que este lugar se iba a terminar. Y si bien tenía otra finalidad, no me pareció loco que Valle Hermoso pueda tener un hospital. Hoy, ediliciamente, está terminado en un 100 por ciento. La segunda etapa queremos concretarla en un mes y la tercera antes de fin de año. Este es el principio de muchas cosas que se merece esta localidad que ha crecido mucho”, destacó Caserio al encabezar la inauguración.
En diálogo con La Estafeta, agregó: “Yo le digo ´hospitalito´ porque somos un pueblo chico, pero significa mucho para esta localidad. Es un centro de salud que está dispuesto a trabajar con todos los hospitales de la zona, porque la idea es aliviar el trabajo en el Hospital Municipal de La Falda y el Domingo Funes. Creo que si todos trabajamos en conjunto es mucho más fácil la salud”.
La obra y la adquisición de nuevo equipamiento médico y electrodomésticos para uso cotidiano de los/as 30 trabajadores que componen la planta fija demandó una inversión total cercana a los 38 millones de pesos: 26 fueron aportados por Nación y destinados a finalizar la obra inconclusa del CIC -idea que a principios de 2022 mutó a hospital- mientras que los 12 millones restantes corrieron por cuenta del municipio.
Del acto participaron el director del Instituto de Investigación y Planificación Sanitaria del Ministerio de Salud provincial, Carlos Nouzeret, quien entregó en mano al intendente la habilitación del Registro de Unidades de Gestión de Prestaciones de Salud (R.U.Ge.Pre.Sa.) para que el hospital funcione “de acuerdo a las normativas del ministerio”. También asistieron funcionarios municipales, entre ellos la directora de Salud, y ahora del hospital, Carolina Llanos; concejales; representantes de instituciones intermedias y vecinos/as.
“Los servicios médicos van a ser esencialmente los mismos que se prestaban en el dispensario, con las especialidades básicas habituales. Sí hemos mejorado el espacio con el que contamos y se incorporó aparatología que no teníamos. En 90 días ya debería estar funcionado el sector de diagnóstico por imágenes con ecografía y radiografía y, en la tercera etapa, se inauguraría un internado de día y de noche con pacientes que necesiten asistencia hospitalaria para medicación o por requerimiento de oxígeno”, destacó Llanos.
Y completó: “Son camas frías para mejorar el estado general de ese paciente y saber si va a poder volver a su casa o necesita la derivación. Eso es algo que no teníamos y es muy necesario porque no es fácil conseguir una derivación en el Valle de Punilla. Es un gran compromiso porque es un comienzo que tiene mucho por delante, hoy habilitamos casi un cuarto de lo que soñamos que sea, pero alguien tenía que dar el primer paso”.
